miércoles, 14 de julio de 2010

El rencor...


El tema del día era el resentimiento, debíamos llevar papas y una bolsa de plástico...
Elegir una papa por cada persona a la que guardábamos resentimiento... escribimos su nombre en la papa y las pusimos dentro de la bolsa.
Algunas bolsas eran realmente pesadas.
Durante una semana llevaríamos con nosotros a todos lados esa bolsa de papas.
Naturalmente la condición de las papas se iba deteriorando con el paso del tiempo.
El fastidio de acarrear esa bolsa en todo momento me mostró claramente el peso espiritual que cargaba a diario y como mientras ponía mi atención en ella para no olvidarla en ningún lado, desatendía cosas que eran más importantes para mi.

Todos tenemos papas pudriéndose en nuestra mochila sentimental.
Este ejercicio fue una metáfora del precio que se paga a diario por mantener el resentimiento por algo que ya había pasado y no podía cambiarse.
Me di cuenta que cuando me llenaba de resentimiento, aumentaba mi stress, mi atención se dispersaba...
Perdonar y dejarlas ir me lleno de paz y calma, alimentando mi espíritu.
La falta de perdón es como un veneno que tomamos a diario a gotas pero que finalmente nos termina envenenando.
Muchas veces pensamos que el perdón es un regalo para el otro sin darnos cuenta que los únicos beneficiados somos nosotros mismos.

El perdón es una expresión de amor.
El perdón nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo.
No significa que estés de acuerdo con lo que paso, ni que lo apruebes.
Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimo.
Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamiento negativos que nos causan dolor o enojo.
La falta de perdón te atan a las personas con el resentemiento.
Te encadena.
La falta de perdón es el veneno más destructivo para el espíritu ya que neutraliza los recursos emocionales que tienes.
El perdón es una declaración que puedes y debes renovar a diario.
Muchas veces la persona más importante a la que tienes que perdonar es a ti mismo por todas que no fueron de la manera que pensabas.

La declaración del perdón es la clave para liberarte ...
Perdona para que puedas ser perdonado, recuerda que con la vara que mides, será medido...
Aligera tu carga y estarás más libre para moverte hacia tus objetivos.

" A veces sentimos que lo que hacemos es
una gota en el mar, pero el mar seria menos
si le faltara esa gota."
Madre Teresa de Calcuta.

2 comentarios:

  1. A veces quiero perdonar a alguien y no puedo, me es muy dificil.
    Como haces para ser tan buena y ser asi?
    Espero que seas feliz con esa forma de ser y entiendo porque todos quieren hablarte y sentir tu amistad.
    Te quiero.
    Firmo yo Carol.
    ( De R.Dominicana )

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  2. Hermoso como siempre,y creeme alguna vez que otra he perdonado y me he quitado carga de encima,pero hay cosas en la vida y situaciones que el perdon se transforma tanto en odio que puede contigo y no logras poder dominarlo por mas que quieras.Yo creo que el perdon lo tienen que buscar todas las personas implicadas,porque si uno no quiere el odio inclusive se hace mas grande y eterno.Muchas gracias por compartir tan hermoso texto,me encantan tus reflexiones,porque me haces reflexionar,un besote cuidate.

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